El nombre correcto de este aparato es férula de descarga y sirve para prevenir las consecuencias que el bruxismo (hábito de apretar o rechinar los dientes) tiene sobre los dientes previniendo el desgaste dental y/o tratar trastornos de disfunción de la articulación temporo-mandibular.
El bruxismo (apretar o rechinar los dientes involuntariamente) si no se previene rápidamente puede desgastar los dientes y causar molestias en la mandíbula y dolor de cabeza.
Está diseñada para actuar como una separación mecánica de los dientes previniendo su desgaste al disipar las energías transmitidas por las fuerzas oclusales del bruxismo.
De esta manera permite que los músculos faciales se relajen y alivia la tensión miofascial (que es causada por los músculos de la mandíbula por apretar los dientes y que puede conducir a dolor en la mandíbula, en dolores de cabeza y el dolor y/o contractura posterior del cuello y cervicales).
Indicación de la férula descarga
Están indicadas para cualquier tratamiento de disfunción mandibular o dis-armonía en la oclusión, siempre y cuando su diseño cumpla un mínimo de requisitos.
Debe ser estable en boca y perfectamente retenida en la arcada donde se coloque ya sea una férula superior o inferior. Ha de ser montada con una dimensión vertical mínima, totalmente soportada. Se recomienda un grosor de férula de unos 2 a 3 mm.
Debe disponerse en un plano oclusal liso sin excavaciones para las cúspides de los dientes antagonistas, que deben apoyarse en ella pero no penetrarla. En el caso de la férula de Michigan, ha de disponerse con guía canina y guía anterior bien marcadas para proporcionar una dis-oclusión posterior inmediata con cualquier movimiento ya sea de lateralidad o protusión (mandar la mandibula para adelante).
El material idóneo es el acrílico transparente confeccionado mediante una técnica indirecta en la que se toman impresiones de la boca del paciente con alginato y se mandan los modelos junto con una cera de mordida al laboratorio para la confección mediante encerado en un articulador semiajustable.
Se intentará en todos los casos desprogramar la articulación temporo-mandibular, llevándola a la posición de máxima relajación con el fin de reducir la actividad muscular durante la noche o incluso durante el día en los casos mas extremos.
Las placas o férulas de descarga pueden ser inferiores o superiores, según la arcada en la que se inserten y deberán ser siempre duras. Las férulas blandas pueden servir como protectores bucales para deportistas, y como auxiliares del tratamiento del bruxismo.
Una vez que se recibe la férula de descarga del laboratorio, el odontólogo deberá ajustarla en boca. A la semana se hará un control de la férula para volver a ver el ajuste y la estabilidad que tiene en boca.
Desde los primeros días en los que se coloca la férula de descarga, el paciente ya sentirá un alivio en cuanto a los dolores mandibulares, cervicales, de cabeza y/o oído que le hayan hecho acudir a la consulta. Además de prevenir que el paciente siga desgastando los dientes por el rechinar o apretar los dientes.
La férula de descarga se emplea para prevenir las consecuencias del bruxismo sobre los dientes evitando el desgaste del esmalte y disipando las fuerzas parafuncionales.
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